
La siguiente semifinal nos dejó un bonito duelo en la portería. Svensson y Saric. Ambos compartirán equipo la próxima campaña. Pero ayer defendieron los intereses propios como si su vida dependiese de ello. Si Pórtland se mantuvo con opciones en el partido hasta el último segundo, fue gracias al sueco que le paraba todo a los del Ademar. La nutrida afición leonesa se desesperaba ante sus grandes paradas. Pero enfrente estaba Saric que también fue un auténtico muro. Del resto se pueden rescatar dos nombres. El del nuevo internacional Ruesga, que vislumbra un buen futuro para el balonmano nacional. Y el de Stranovsky que desde el extremo izquierdo hizo verdaderas virguerías, aunque creo que puede hacerlo mucho mejor si logra conseguir un buen ritmo a lo largo de los 60 minutos de juego.
Para hoy queda la final entre Ciudad Real y Ademar. Eclipsado el partido por el Barça-Real Madrid, la asistencia al Pisuerga es una incógnita. El balonmano de calidad está asegurado. Pero las pocas luces de la Asobal, que no ha sabido, o mejor dicho, no ha querido rectificar a tiempo, provocarán que el pabellón no logre un lleno, a pesar de que en Valladolid está una de las mejores aficiones del Mundo. En definitiva, que pase lo que pase, el gran triunfador de la última gran competición española del 2007 es el Ademar, que con su incursión en la final, sumada a la del Ciudad Real, se ha asegurado la participación en la Champions League de la próxima campaña.
A. Alvarez Rodrigo
1 comentario:
Tienes toda la razón, como siempre falta de planificación y de marketing. Pese a todo creo que la afición vallisoletana dio el do de pecho, sobre todo en el partido del Balonmano Valladolid.
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