El objetivo

El equipo ganador es el que se levanta el primero después de una derrota

sábado, 13 de marzo de 2010

Templanza

Un nuevo fracaso del Real Madrid. Todos han sido duros, pero en esta ocasión duele más por varias razones: la millonada gastada en verano, la esperanza de la afición, la final en el Bernabéu. Motivos, hace un día, que espoleaban a los madridistas hacia una noche mágica, y que ahora pesan como una losa: ¿para qué tanta inversión? ¿Ganará el Barça la Champions en Madrid? Parecía que el 2-6 había sido el culmen de los males, pero aún puede ser peor.


La pregunta que se deberá estar haciendo ahora Florentino Pérez es clara: ¿Y qué hago? Respuestas, a patadas. Cada uno tendrá la suya, cada aficionado tiene claro a estas horas de quién es la culpa, a quién hay que elegir de chivo expiatorio. Todo apunta a Manuel Pellegrini. Sinceramente, tenía esperanzas en el chileno, pero, a día de hoy, me ha defraudado. En dos momentos claves de la temporada le han dado una lección táctica: primero Anquela y, ayer, Claude Puel.


Sin embargo, ¿es la solución cargarse al entrenador? Puede ser, pero el Real Madrid lleva muchos años fagocitando entrenadores a un ritmo demencial. Me he acordado del mal inicio de Frank Riijkaard en el Barça. Y luego, ¡miren que resultados! Quizá por ello sea el momento de la “templanza”, como dice Valdano, confiar en el proyecto que se creó en verano, y esperar resultados para la temporada que viene. Porque ésta, ayer, quedó ya vista para sentencia en Concha Espina.